La publicación en el DOF este 15 de mayo del acuerdo que limita la participación del sector privado en el mercado eléctrico levantó acaloradas protestas en los sectores y empresas afectados. Actores centrales en la iniciativa privada advirtieron que acudirían a los tribunales y agotarían todas las instancias legales ante lo que consideran un atropeyo a sus derechos, así como una afectación a la sociedad mexicana, ya que se estarán privilegiando formas de generación de energía contaminantes.
En un comunicado conjunto, el Consejo Coordinador Empresarial, la American Chamber en México y el Consejo Ejecutivo de Empresas Globales solicitaron la revocación del acuerdo antes señalado.
En conferencia de prensa de hoy el presidente Andrés Manuel López Obrador no solo no dio muestra alguna de dar marcha atrás en su estrategia energética, sino que arremetió contra la iniciativa privada, a la que acusó de haberse apoderado del sector energético y de conspirar para destruir a Petróleos Mexicanos (PEMEX) y a la Comisión Federal de Electricidad (CFE). “La verdad es para que estuvieran ofreciendo disculpas no para que estuviesen demandando, es para que estuvieran aceptando de que se excedieron y que ya no se puede seguir con lo mismo”, señaló.
Acusó, además, que en sexenios anteriores se les dieron facilidades a empresas para producir energías renovables y limpias en contratos “leoninos” y en algunos casos, negocios sucios, y se dejó de lado a la CFE como si la CFE no produjera energías limpias”.
Se estima que la paralización de inversiones en energías renovables afectará alrededor de 9 mil millones de dólares de obras que se encuentran en distinto grado de avance en el país, así como a un monto considerable, aun por definir, de empresas actualmente en operación.
En opinión de expertos en la materia, la medida del presente régimen obedece a posiciones ideológicas, que buscan privilegiar a las empresas paraestatales reduciendo la compentencia en el sector energético. No existen realmente argumentos lógicos y demostrables que justifiquen las medidas adoptadas, ya que la energía generado por plantas renovables no solo no resulta en un costo para el gobierno, sino que en realidad permite reducir sustancialmente los subsidios que el gobierno destina al sector eléctrico, ya que el costo de generación de las plantas fotovoltaicas y eólicas está actualmente bastante por debajo del costo que tiene CFE en sus propias plantas.
A lo anterior se agrega el efecto engativo que tiene el uso indiscriminado de combustóleo en las plantas de CFE, ya que es de todos sabido que el combustóleo generado en México es de baja calidad y con un elevado contenido de azufre, lo que lo hace caro e inapropiado para la generación de electricidad.
Danos tu opinión, ¿crees que estas medidas son adecuadas para el país?